Normalmente suele ocurrir que, cuando confían en tí, das lo mejor de tí mismo y, al contrario, cuando critican tu manera de actuar, generalmente, te hundes en la miseria. Hagan la prueba y sigan las enseñanzas de ese aforismo que dice: "Ámame cuando menos lo merezca porque es cuando más lo necesito". No hay arma más eficaz que halagar las cualidades de un individuo enfurecido o ironizar sobre algún defecto acreditado de otro engreído y presuntuoso. Verán como, por arte de magia, disminuye la furia del primero, en la misma medida que desaparece, momentáneamente, la vanidad del segundo. Hace falta mucha suerte para encontrar personas equilibradas que sepan administrar con acierto la crítica o el elogio.
Jorge Luis Borges
No hay comentarios:
Publicar un comentario